La habitación era un poco fría y la calefacción no funcionaba muy bien. La cama se sentía incómoda y noté que la ducha se enfriaba rápido, lo que no fue genial. Las sábanas tenían algunos pelos y la limpieza podría mejorar un poco. Pero la ubicación es tranquila y el personal era amable cuando pedí ayuda.

Una cena memorable en el bar

El colchón era muy cómodo, lo que nos permitió dormir bien después de un largo día explorando la zona. La cena en el bar fue una sorpresa, ¡el solomillo de Angus estaba para chuparse los dedos!

Sin embargo, el proceso de check-in fue un poco lento y tradicional, lo que nos hizo perder algo de tiempo. Además, el personal de recepción podría ser más ágil.

La atención del personal fue encantadora, y disfrutamos de una cena en la terraza con vistas al valle. Además, la habitación era espaciosa y el baño tenía una ducha masajeadora increíble.

- Entorno encantador
- Comida deliciosa
- Ducha de hidromasaje impresionante

- Ruido de camiones
- Atención indiferente
- Proceso de check-in lento

El hotel ofrece una buena opción económica y las habitaciones están limpias, aunque podrían mejorar en comodidad. Disfrutamos de un desayuno adecuado y el bar tiene precios moderados. Sin embargo, notamos algunos inconvenientes, como la cortina manchada y ruidos externos que podrían afectar el descanso.

Habitación cómoda pero ruido molesto

La habitación era amplia y el colchón muy cómodo, ideal para descansar tras un día largo. Sin embargo, el ruido de los coches en la carretera fue bastante perturbador y la almohada demasiado blanda, lo que afectó un poco mi descanso.

El lugar tiene buenas vistas y es tranquilo. La habitación era espaciosa y con aire acondicionado, lo que se agradece. Disfrutamos de una cena en el restaurante, pero nos tardaron más de una hora en servirnos aunque no había mucha gente.

La atención del personal no fue la mejor. Parecía que estaban indiferentes a nuestras necesidades y no se notó alegría en su servicio. La comida no cumplió nuestras expectativas y el filete de pez espada estaba seco.

La Yedra me sorprendió con su restaurante, donde la variedad de vinos era más extensa que el menú de una televisión de 500 canales. Disfrutar de una cena con vistas a las montañas mientras el aroma de la cocina andaluza casi me hacía bailar de alegría fue un verdadero festín.

Algo de ruido externo

El entorno es encantador y la comida, fabulosa. El personal muy amable, y ¡vaya con la ducha de hidromasaje! A pesar de ser un hotel de carretera, me sentí en un pequeño oasis.

No soy hormiga, pero parece que mis amigas sí querían hacer una visita.

Restaurante bueno, camas cómodas y wi-fi gratis. Poca limpieza y ruido molesto.

El bar de abajo es siempre un lugar animado con muy buena onda por las mañanas. Las personas que trabajan aquí son super amables y están dispuestas a ayudarte en lo que necesites.

El ruido del bar a veces puede ser un poco fuerte, especialmente en la noche, lo que puede dificultar el descanso.

Restaurante muy bueno, especialmente el solomillo de Angus. La habitación un poco fría y había telarañas en el techo. Buena opción para quienes quieren hacer senderismo.

La habitación contaba con un calefactor, lo que resultó útil para mantenerme calentito durante la noche. La ubicación cerca de la autopista la convierte en una opción práctica para quienes están en movimiento.

Sin embargo, el ruido de camiones desde muy temprano fue algo difícil de ignorar, aunque ya tenía claro que estaba en un hotel de carretera. Además, en una de las habitaciones la mampara de la ducha estaba rota y las toallas eran pequeñas, lo que no mejoró la experiencia. Por otro lado, el colchón podría ser más cómodo. se sentían los muelles, lo cual no es lo ideal para descansar bien. La luz entraba demasiado por la mañana en una de las habitaciones debido a un mal cierre en la ventana.